PINKO BAG FOR ETHIOPIA
2014
En colaboración con Marina Spadafora, en 2014 produjimos una colección de bolsos de algodón 100 % africano con motivos característicos en una fábrica ecológica y sostenible de Adís Abeba, donde solo trabajan mujeres.
Los PINKO Bag de los años 90 han sido nuestro gran éxito: millones de bolsos han custodiado los sueños, los juegos y las esperanzas de toda una generación. En 2014 se creó el proyecto PINKO Bag for Ethiopia y ha representado una nueva visión de la moda: ética y no solo estética.
Marina Spadafora, diseñadora pionera del proyecto Design for Africa y embajadora ética de la moda en Italia, es la creativa elegida para dar vida a la nueva colección de bolsos «PINKO Bag for Ethiopia».
«Fashion with a mission es mi credo —explicó la diseñadora— y he querido expresarlo en los PINKO Bag for Ethiopia, los diseños reproducidos forman parte de las pinturas corporales de los pueblos indígenas del valle del Omo, más de 16 etnias totalmente diferentes unas de otras como los surma, los mursi, los kara, los kwego, los konso y los arbore, pequeñas sociedades arcaicas, animadas por la belleza y el valor y a las que no les ha afectado la civilización. África será el futuro, la artesanía local es un inmenso tesoro que vive en simbiosis con el medioambiente. PINKO Bag for Ethiopia puede crear conciencia sobre estos pueblos lejanos y aportar beneficios que los protejan».
Pietro Negra, presidente de PINKO: «Creo que la globalización puede ser un factor positivo si sabe aportar bienestar a culturas y pueblos en los confines del mundo y si puede despertar la curiosidad de la gente en Occidente. La moda no solo tiene el fin de ser ella misma».
Ahora formamos parte del proyecto Fashion for Development (F4D), la iniciativa humanitaria mundial para el desarrollo en los países del tercer mundo a través de la moda. F4D está reconocida y apoyada por la ONU y promueve la cultura y la independencia económica de las mujeres, que conservan las preciosas tradiciones artesanales de sus países.
Los PINKO Bag for Ethiopia están hechos de 100 % algodón africano, en una fábrica ecológica y sostenible de Adís Abeba, donde trabajan solo mujeres: «Pero sigue siendo trabajo, no caridad —precisó Marina Spadafora— y, aunque sea poco a poco, contribuirá en gran medida a la autonomía económica de las mujeres y a la reconquista del respeto en su sociedad».
